Visualiza...

Visualiza tu meta, tu sueño, siente la sensación de que ya está echo. Empieza a dar pasos pequeños pero seguros, moviendo todos los hilos, sin perder la confianza en ti. Y deja que el universo, se encarge del resto.

Tómate tu tiempo.

Tómate tu tiempo para reflexionar sobre lo que quieres hacer. Tómate un momento para decidir qué y cómo quieres que sea tu futuro. Es perfectamente aceptable, querer que te pasen cosas maravillosas.

En el cielo estas....

En el cielo estas, pero te siento cerca, aquí, a mi lado. Siento tu esencia, tu presencia, sé que no estoy sola como en aquel momento pensé. Sé que estas aquí, guiándome en mi camino, alumbrandome en mis días oscuros y hablándome de vez en cuando al oído.
Me siento privilegiada por tenerte y sentirte tan presente, y también sé, que te haces notar con los demás muy sutilmente. Desde donde estas nos observas, y desde la tierra, nosotros te recordamos. Fuistes tan especial, que te despedistes de nosotros en el día de tu santo.
Tu recuerdo estará siempre dentro de todos nosotros, dentro, de nuestros corazones.

Gracias.

Gracias a la vida, al mundo, al universo.... Por permitirme sentir, lo que hoy siento. Por las personas que me observan sin mirar, por las que me escuchan sin juzgar, por las que me transmiten en sus gestos y palabras, que siga adelante en mi camino, y por la confianza que depositan en mi.
A todo y a todos, gracias, gracias, gracias.

Karma.

Cuando seas consciente en tu presente, por tu pasado vivido, será cuando empieces a sanar tu karma, a cortar los hilos del patrón adquirido. Una vez conseguido, tu vida cambia.